Me pregunta Jacobo si voy a volver a hacerles la pelota en el blog. Pues sí, aun tienen margen para impresionarme.
Luis siempre valora mi capacidad de valorar las cosas «¡qué interesante!…» Pero esta vez lo pusieron fácil, como veréis más adelante. Y eso que era en «mi» pueblo, bueno, casi.
Todo esto vimos en una tarde, un poco deslucida por la falta de luz, nunca mejor dicho. Me quejé un poco a la organización por ese error y, a cambio, me dieron frutos secos gratis.



























